Diviértete en familia, mientras le enseñas a tus hijos la importancia de la actividad física.
Compartir momentos en familia es muy importante, no solo para fortalecer los vínculos, sino también para incentivar en los pequeños su desarrollo cognitivo y hasta físico. El juego es una excelente alternativa para estimular habilidades como la agilidad, coordinación, concentración, destreza y velocidad.
Además, si los niños tienen la oportunidad de trabajar en equipo entenderán cómo funcionan las reglas, podrán seguir directrices, respetar el turno de los demás y serán mejores compañeros, al tiempo que creas recuerdos, establecer rutinas y, también, les enseñarás a vencer el sedentarismo.
Por eso, hoy queremos compartirte algunos juegos de pelotas para niños que podrás poner en práctica con los más pequeños de casa. ¡Continúa leyendo!
Beneficios de los juegos de pelotas para niños
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Si tu pequeño está empezando a moverse, puedes usar este tipo de juegos para incentivarlo a gatear o, si es más grande, a correr para alcanzarlo.
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Muchos terapeutas recomiendan estas actividades para desarrollar la coordinación motora, la fuerza muscular y el equilibrio.
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Jugar para combatir las pantallas, salir de casa y moverse constantemente, previniendo problemas de salud y estabilizando partes de su cuerpo, como las articulaciones.
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También entenderá más fácilmente conceptos como la distancia, velocidad y hasta la puntería.
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Sus habilidades sociales se potenciarán al hacer nuevos amigos y trabajar en equipo.
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Aumentarán su autoestima y confianza al ser recompensados por el juego limpio, la cooperación, el compañerismo y el respeto.
Ahora, ¡lo más importante! Elige un juego idóneo para la edad de tu pequeño y diviértanse mientras aprenden.
Ideas de juegos con pelotas para niños
De 0 a 4 años
Para los más pequeños de casa, hay que ofrecer esos primeros momentos para entender el movimiento, lo que significan las texturas y el funcionamiento del juego, por eso, es indispensable usar una pelota muy suave, blanda y de poco eso.
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Pasar la pelota: aquí, simplemente, la pelota se va y regresa, pero es una oportunidad para que reconozca el objeto, sea receptivo con la actividad y se divierta muchísimo.
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¿Dónde está la pelota?: enseñarle al niño a mantener en mente este objeto y explorar a su alrededor para encontrarla, es el primer paso para estimular destrezas cognitivas, ayudarle a establecer recuerdos y aceptar reglas.
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¡Cesta!: improvisa una canasta para establecer el objetivo del juego, puede ser un cajón o una caja. Luego, aclara las pautas para marcar un punto, será un espacio de entretenimiento y es la oportunidad para indicarle cómo recibir la recompensa al ganar.
De 4 a 7 años
Etiqueta P: En estas edades los niños ya tienen nociones más claras de lo que significan los juegos con pelotas, lo que se traduce también en una oportunidad para introducir el trabajo en equipo con otros pequeños, ya sea en el colegio o en casa.
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Atrapa el balón: un juego en parejas y por turnos, en el que se debe evitar que el equipo contrario atrape la pelota, sin usar las manos. Ideal crear un sistema de puntos con el pequeño para que entienda mejor y más reglas, a fin de ordenar la competencia.
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Ronda de palabras: aquí vamos a empezar a ejercitar la memoria y algunas habilidades cognitivas, pues el juego consiste en hacer un círculo entre varios niños y lanzar la pelota al aire mientras se dice una palabra, quien la atrape debe recordarla, añadiendo una nueva y así sucesivamente. Al final será una recopilación de palabras, ojalá de la misma categoría, y finalmente, si se rompe la cadena, la persona que no la continuó tendrá una penitencia.
Desde los 8 años
Seguro que muchos de los juegos que hemos mencionado los recuerdas, pero en este punto vas a tener recuerdos muy explícitos de tu infancia. Ese es uno de los principales objetivos: estimular la memoria, además del compañerismo y crear un precedente sobre el amor al deporte.
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Relevos: este juego se trata de dividirse en dos o más equipos y fijar varias estaciones, los grupos tendrán un jugador en cada punto y deberá correr hasta el siguiente con el balón en la mano. Si se cae, deberán volver a comenzar, por eso es un trabajo de mucha atención y agilidad.
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¡Que no se caiga!: en un círculo pasarán la pelota, pero ojo, deben hacerlo sin que toque el suelo y con reglas diferentes en cada ronda. Por ejemplo, para iniciar pueden establecer que se pase sin tocarla con las manos o solo con un codo. Será muy emocionante y estimularás a creatividad en tus pequeños.
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Vuela, vuela: en una ronda, los jugadores tomarán distancia agarrados de las manos y alguien fuera del círculo, se situará de espaldas para lanzar la pelota al aire, al tiempo que grita el nombre de uno de los niños. Este pequeño deberá atrapar este objeto sin permitir que caiga al suelo, si no lo hace, deberá pagar una penitencia.
Existen muchos juegos con pelotas para niños que les permitirán practicar aprender sobre diferentes habilidades, ya sean deportivas o cognitivas, solo hace falta un balón y mucha creatividad.
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